vehículo de opinión universitaria
28 de octubre de 1998, número 87
Contenido:
Eso decía el ministro Cárdenas y mientras usted cree que el Gobierno no pone atención a las universidades, que las tiene abandonadas, que se pone lento cuando se trata de traspasar los recursos correspondientes, que no oye, que no habla... cosas están sucediendo que dan indicios en contrario. Después de todo, eso que usted ve no sería suficiente para satisfacer el interés que se ha dado en llamar "privatizador" de este Gobierno.
No, no sería suficiente. Y es por ello que -aunque usted no lo vea- se están realizando apresuradamente experiencias "novedosas", "alternativas", en las que todo lo que fue la rica tradición universitaria se ve limitado a cuestiones de mercado, y particularmente de oferta y demanda de títulos.
Sucede que, no sabemos a cuenta de qué, las universidades -así en general- han mantenido un cierto prestigio social, lo cual, aunado a los relativamente altos sueldos ganados por los universitarios, ha generado una ansiosa demanda por la obtención de título universitario. Y las ofertas son cada día más amplias: universidades desconocidas, privadas, técnicas, politécnicas, pedagógicas, experimentales, etc.
Según aquella concepción, no hay justificación para no atender la demanda insatisfecha, cobrando, por supuesto, lo que la gente que demanda esté dispuesta a pagar.
Aparte de la Universidad Simón Bolívar, en el otro caso modelo del Gobierno, la Universidad Simón Rodríguez, se está cobrando a los interesados Bs. 30.000 mensuales o más, por cursar estudios en alguno de los convenios suscritos por esta institución con multitud de organismos privados y públicos, muchos de los cuales ofrecen la posibilidad de cursar estudios sin contacto físico con la universidad (no sabemos si existe otro tipo de contacto).
Del largo número de dudas que surgen de estos "convenios" (es un sí pero no; es la universidad pero vas por el convenio; pagas por aquí pero te gradúas por allá; el profesor es de la universidad pero no necesariamente; esto no es como la universidad, es más rápido..., por qué no es la universidad la que cobra, etc.), me limitaré a estas dos:
Pues no fue difícil (haga algo en contra o ponga sus barbas en remojo): en una reunión del Consejo Directivo de la USR se redactó una resolución que crea una Fundación con unos 'considerandos' pasmosos, como estos:
y con este "apoyo" jurídico, sin conocimiento ni participación de la comunidad -sino después- se ha construido un entramado tal que ya no se sabe dónde comienza una cosa (la USR de verdad) y termina la otra (la mal llamada "virtual").
Y usted creía que la masificación de la educación superior había llegado a un tope. Pues no, apenas comienza. El hecho de que falte la entereza moral para declarar a viva voz el propósito mercantilista de estas "experiencias virtuales" no debería confundirlo a usted, así como tampoco debería confundirlo la superficial alegría de quienes están pagando tarifas elevadas por recibir un título universitario que antes no costaba plata sino esfuerzo.
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Lo universitario
La USR
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1
Aprediados colegas: Sería interesante conocer la opinión de la directiva nacional de FAPUV en relación con la actuación de los profesores Rafael Caldera y Antonio Luis Cárdenas, como gerentes de la educación venezolana; especialmente en cuanto al trato dispensado a las universidades nacionales, por la dependencia a los pedimentos de los organismos internacionales (FMI, BM. BID). ¿Cuál es la función del tribunal disciplinario?
Prof. Dr. Luis B. Mata Guevara, (UNERMB)
2
Profesor
Héctor Freneites
Presente.-
Me dirijo a usted con el propósito de aclararle que el Director de Tecnología de Información al cual se hace referencia en su artículo "Breves de la USR", en La Cuestión, soy yo José Luis Ovalles P., Profesor con veinte años de docencia en la UNESR, nos conocimos, al igual que a Eloy Castro Cano, en mis primeros años en la universidad, en el desaparecido Núcleo de la Castellana. Durante esos años además de la docencia me involucre en otras actividades académicas que no vale la pena reseñar acá, compartí como profesor a medio tiempo la docencia con el desempeño profesional en la empresa privada.
Por todo eso rechazo el calificativo de "personaje" que en forma despectiva utiliza en su publicación. Desde agosto del año pasado me desempeño en ese cargo, por invitación del Rector con el propósito de contribuir a llevar adelante los proyectos de la universidad de incorporar nuevas tecnologías en los esquemas de enseñanza aprendizaje. Por esa razón renuncie a mi cargo en la empresa privada y me incorpore a la universidad, considerándolo un derecho legitimo.
No entiendo la razón de querer diferenciar la Fundación Universidad Virtual y la UNESR, cuando sencillamente es una Unidad Organizativa de la universidad, o mejor dicho es una sola universidad. No es la primera universidad que tiene una fundación, las tiene la UCV y la Simón Bolívar. Por eso, si para usted es una duda si trabajo para FUNIVIR o para la UNESR, para mi no lo es por que me considero un docente de la universidad.
Son muchos los logros que se han alcanzado a través de la Funivir, tal es el caso de la formación de docentes en el uso de nuevas tecnologías, utilizando las aulas de aprendizaje y la infraestructura tecnológica que allí existe. Por eso independientemente del aspecto financiero y de negociación aprobada por las autoridades universitarias en su oportunidad, tengo que certificar su funcionamiento, no puedo afirmar otra cosa, sino que esta funcionando. Igual sucede con el outsourcing administrativo, nos pagan mediante el funcionamiento de un sistema de nómina que esta operando, se registra las operaciones contablemente mediante un sistema contable que funciona, por lo tanto tengo que certificar su funcionamiento, independientemente repito del tipo de negociación. Los demás sistemas administrativos están en este momento en evaluación por las autoridades.
Hubiera querido no escribir esta carta, pero me parece injusto que dañen u ofendan a una persona, o mejor dicho un colega, sin derecho a defenderse, por eso te agradezco si es posible publiquen esta carta en La Cuestión. No quiero despedirme sin hacer mención al artículo de José Miguel Cruces, al que no conozco, quien hace referencia en su artículo de que las autoridades, cito: "Aparte de haber comprado las conciencias de la mayoría de los docentes de esta universidad (a precios muy bajos, por que sencillamente no valen más)", es un insulto muy fuerte, espero y aspiro que esa mayoría a la que hace referencia se revele y reaccione ante tales insultos.
Atentamente,
José Luis Ovalles P. (USR)
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