la cuestión:

vehículo de opinión universitaria

26 de enero de 2000, número 109
quinto aniversario

Contenido:



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Breves universitarias

Héctor Freneites

La directiva de FAPUV está proponiendo la creación de un Fondo de Contingencia para socorrer a profesores afectados por la tragedia del 15 de diciembre. Tardíamente se manifiestan.

FAPUV está sorprendida por actitudes asumidas por funcionarios del gobierno y miembros de las propias universidades contrarias a principios autonómicos y democráticos. Y por ello invita a la discusión de temas vitales. Nosotros proponemos como puntos de una agenda:
  1. Reorganización de la FAPUV
  2. Elecciones de base para la dirigencia de FAPUV.
  3. Reforma de la educación superior.
La vicerrectora administrativa de la UC informó que esa casa de estudio recibió durante la pasada semana créditos por más de 5.377 millardos; con esos recursos se cancelan prestaciones a los jubilados del 2do. y 3er. trimestre del 98.

El preacuerdo OPSU/FENATESV (empleados administrativos) contempla un 50% de aumento salarial a partir de enero 98, incluyendo el 10% más el 6,43. Este aumento comenzará a pagarse a partir del 1ro. de enero de 2000. El aumento podría ser cancelado en el mes de abril. Este preacuerdo debe ser ratificado por el CNU del 28-01-00.

El 23-01-00, la Asociación de Trabajadores Jubilados de la Simón Bolívar/ATAUSIBO, en una carta abierta solicita al Ejecutivo nacional una comisión supervisora para que garantice el pago de las prestaciones sociales. El dinero está ahí. Son 6,6 millardos. ¿Y qué temen los jubilados? Que sean desviados a otros propósitos.

Fue cancelado el permiso de funcionamiento al Instituto de Tecnología 'Isaac Newton' según decreto No. 631 del 19-01-00. Por cierto que la USR es un mar de rumor. Si quitan al rector. Si lo dejan hasta terminar su período. Que lo más sensato es removerlos a todos. Que se necesita un rector de afuera. Que es preferible un rector propio. Que un mayor equilibrio sería una combinación de autoridades propias y de afuera. Hay rumores para todos los gustos. Uno solamente oye...

La única institución que canceló el retroactivo del año 98 fue la Universidad 'Rómulo Gallegos'.

De la USR

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Los apuros de la crítica a la disciplinaridad

Aldo Colmenares

          Los hombres mueren.           La hierba muere

          Sócrates es un hombre         Los hombres mueren

          Sócrates muere                Los hombres son hierba.

                                           -Gregory Bateson-
Estos dos silogismos nos muestran dos maneras difrenciadas de pensar la realidad: el de Sócrates enlaza por el sujeto: "hombre", tal como lo haría la racionalidad expresada por el conocimiento científico; el de Bateson por el predicado: "morir", tal como, según lo señala este autor, lo harían los poetas, pero también, como ha existido durante el tiempo en que ha existido la vida. Pensarla según la racionalidad apenas acompaña los algo más de 100 mil años de la invención del lenguaje. Manera que utiliza el biólogo G. Bateson para mostrar la tensión existente entre las disciplinas científicas y las opciones para desbordarlas, ante sus carencias para enfrentar las nuevas visiones de la realidad. El esencialismo-racionalista de la disciplina científica se convierte en un "encajonamiento" que obstaculiza la búsqueda del conocer.

Pero tal forma de conocer ha rendido frutos a la propuesta de la modernidad de un mundo de crecimiento infinito. El mercado, el liberalismo y, más recientemente, la virtualidad mass-mediática conforman los "instrumentos" de la promesa de alcanzar tal futuro, y a ellos apoya el conocimiento aportado por la disciplinaridad racionalista.

Sin embargo, en un momento de su historia la "normalidad" racional hizo un "ruido" tremendo. El "mayo francés" (1968) advirtió sobre la incapacidad de las disciplinas científicas para dar respuesta al problema de los más necesitados, a la mayoría marginada de las ventajas de su uso. La respuesta del poder apoyado en tales disciplinas y centros del conocimiento no se hizo esperar. Los científicos, con J. Piaget como su figura insignia, propusieron las vías de la reforma, en una consideración formalista que suponía una evolución natural de la ciencia, de las disciplinas. Según el biólogo suizo, las disciplinas tenían una diferencia sólo funcional y un "isomorfismo" interno a ellas permitiría crear las bases para la "aparición" de los elementos interactivos, que en la secuencia multi, inter y transdisciplinar llegarían a un "sistema total, sin ninguna frontera consistente entre las disciplinas" (Piaget 1970, p.19). Solución ésta que no se diferencia en nada de la linealidad en la posibilidad evolutiva de la construcción de pensamiento, afecta a la disciplinaridad moderna, que criticaba. Pero que, además, no planteba ninguna salidad a la cultura, bien resguardada, de los estancos de privilegio disciplinar.

Afuera, los caminos de la novedad se hicieron múltiples: el otro, la ecología, la identidad espacial, lo local, el multisentido histórico, lo femenino, hicieron mella en la tendencia única y técnica de la ciencia. Pero las respuestas no logran enfrentar las carencias de la "realidad", con lo que la acusación de abstraccionista, discurso de sabor intelectual, faltos de programas de investigación para interrogar a la realidad y otros son el común ataque contra las nuevas propuestas.

Este requerimiento utilitarista podría deberse a las enormes carencias con que tropieza la humanidad y la falta de respuesta que el conocimiento tiene para con ella, pero también a la forma como cada cultura enfrenta el uso de sus creaciones y, por ende, hacia dónde las dirige, cuál es la prioridad que da a la forma de construir conocimiento. Esta pareja de circunstancias podría limitar las respuestas a las "necesidades más urgentes" y dejar para un después imposible de prever y, probablemente de ejecutar, las demás consideraciones al respecto. Si es cierto lo que ahora criticamos del conocimiento "moderno" podríamos decir que, en su momento, la salida objetivista-mecanicista fue la más "fácil", la que respondía, posiblemente, a los requerimientos de las "necesidades urgentes" de ese entonces. Este señalamiento nos luce importante porque podría "pasarse el momento" y estaríamos de regreso en la seguridad disciplinar que señala la evolución piagetiana. A las soluciones para el mercado y la tecnología, que alimenten "el confort" del "mejor" nivel de vida, de los menos, o de la esperanza de vivirla, de los más, dada por la virtualidad mediática.

La tecnología y el mercado parecen brindar esa posibilidad "blanda", no atenazante ni normativa, de incorporarnos a sus "deleites" o, cuando menos, a la esperanza virtual de disfrutarlos algún día.

Piaget, J.(1970) La epistemología de las relaciones interdisciplinarias (mimeo). Traducción de Manuel Vaquerizo del original francés; UPEL-Barquisimeto, 1976.
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Un lustro sin lustre

Eloy Cano Castro

El 1 de febrero cumple 'La Cuestión:' sus cinco primeros años, durante los cuales ha intentado servir como un vehículo para distribuir lo que se suponía era la diversidad de opiniones existentes en el ámbito universitario acerca de la vida y el destino de las universidades venezolanas. Pasado ese tiempo, queda la impresión de que no se ha satisfecho la meta, probablemente porque el medio no responde completamente a las expectativas del profesorado universitario (principal destinatario de esta exigua publicación y principal responsable de la situación universitaria).

A pesar de ello, desde los lejanos tiempos de 1200 bits por segundo, textos sin acentos y limitado alcance, ha ido creciendo tanto el número de lectores como el ámbito de interés de este pequeño periódico quincenal. Actualmente, estimamos que llega a un 10% del total del profesorado universitario y aunque limitada, la respuesta que recibimos ha sido hasta ahora favorable a la continuación del esfuerzo. Esta respuesta ha ido creciendo en la medida que 'La Cuestión:' ha ido llegando a lectores de mayor número de instituciones. Se han publicado más de 400 escritos originales (y nunca anónimos) provenientes de la UCV, UNA, UPEL, ULA, UDO, UC, UNELLEZ, USR, UNEG, UNERMB, y esperamos que se amplìen y profundicen las colaboraciones de todas las universidades venezolanas. La intención sigue siendo compartir opinión e información universitaria de actualidad.

En el último año, 'La Cuestión:' ha concentrado su acción, al abandonar la versión impresa (que llegó hasta el número 100, julio 1999), y sus versiones paralelas (PDF, etc.), reduciéndose a mantener la edición electrónica, en sus dos variantes, correo-e y HTML.

Parece oportuno solicitar a los transigentes lectores de 'La Cuestión:' una opinión acerca de la forma y contenido de la publicación, aprovechando la ocasión de este quinto aniversario. Observacines, críticas o recomendaciones sobre el formato, forma de distribución, periodicicidad, así como sobre contenido, cobertura o carencias percibidas serán bien recibidas.

Finalmente, sólo queda reiterar la invitación a compartir su pensamiento en estas páginas electrónicas, en tiempos que la dinámica universitaria (que ha estado bastante estática) promete ser interesante, en función de los tópicos pendientes, de los cuales quisiera mencionar apenas: el advenimiento de una nueva Ley de educación superior; la discusion sobre las fusiones, reformas o reconversión de universidades; el mantenimiento o el cambio de la autonomía y la democracia universitaria; la pertinencia de FAPUV y de la práctica de la camarilla; y, la valoración relativa del trabajo administrativo frente al académico.


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© editor: Eloy Cano Castro, eloycanocastro@gmail.com