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2020-04-23

Extinciones

Estaba Marco Atilio Régulo en su segundo consulado y con la intención de invadir Cartago reunió una gran flota, los cartagineses trataron de impedirlo y se enfrentaron frente a Licata (en Sicilia) con el resultado quizá imprevisto de la derrota cartaginesa y la escasa pérdida de 24 naves romanas por lo que prosiguió con el plan original.

Desembarcó en el oriente del territorio cartaginés y luego de tomar la ciudad de Aspis comenzó a arrasar todos los campos y fue acercándose a Cartago. En Adis logró derrotar al enemigo gracias según parece a la torpeza de los generales cartagineses que no aprovecharon sus elefantes y caballería apropiadamente.

En un momento dado llegó al río Bagradas (hoy llamado Medjerda) donde se vió impedido de alcanzar el agua por la presencia de una serpiente gigantesca de unos cuarenta metros de largo que atacaba a los soldados con sus colmillos y aplastó a más de uno con la cola. Les parecía más terrible la serpiente que el propio ejército de Cartago. Al ver que no la podían herir con las armas que llevaban en la mano la atacaron con catapultas hasta que la mataron con grandes piedras.

Hubieron de abandonar el campamento porque el río se tiñó de rojo con la sangre de la bestia y el aire se corrompió con sus efluvios pestilentes. La piel fue enviada a Roma.

En el enfrentamiento posterior cerca del río, los romanos fueron derrotados y Régulo fue capturado.

Ruta de la invasión

Estos enfrentamientos fueron parte de lo que después se llamó primera guerra púnica según el cuento de Valerio Máximo quien dice seguir la lectura de la historia de Roma de Tito Livio. Una serpiente gigantesca de la que nunca más se tuvo noticia mencionada de una forma neutra y natural en un relato por otra parte totalmente creíble… en principio.

Pero, de los más de ciento veinte libros de la historia de Tito Livio solamente se conservan unos cuarenta, y el cuento de la invasión a Cartago y encuentro con la serpiente enorme formaba parte del libro XVIII, uno de los que se han perdido. Sólo se conserva una versión resumida que dice lo siguiente en el fragmento pertinente:

Atilio Régulo, cónsul, habiendo derrotado a los cartagineses en una batalla naval pasa a África, mata una serpiente de magnitud prodigiosa con gran pérdida de sus hombres. El senado, a cuenta de su exitosa conducta en la guerra no nombra sucesor…..

Por otro lado, Polibio que está más cercano temporalmente a los hechos no menciona ninguna serpiente. Livio escribe en tiempos de Augusto, esto es más de 200 años después, y Valerio Máximo una generación después en tiempos de Tiberio. La obra conservada de Valerio se llama ‘Hechos y dichos memorables’, basada en obras históricas, sin embargo su autor se considera un retórico que además usaba lenguaje florido y rebuscado.

Los criptozoólogos utilizan este cuento para atestiguar la existencia de animales ahora desaparecidos como es el caso de los mismos elefantes norafricanos utilizados por los cartagineses,

Una lectura por encimita de Tito Livio o más bien una búsqueda de la palabra serpiente en el texto me hace ver que las referencias a este animal suelen estar asociadas con maldiciones o presagios, lo que tampoco contribuye a su credibilidad.

Así que lo que podría ser un testimonio de mayor valor que una foto del monstruo de Loch Ness, termina siendo una nota dudosa que además rebaja la credibilidad de la larguísima historia narrada por Livio.

Aunque…



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